The United States is a unique country, and there are many qualities that make it so. One unique quality, which is both a blessing and a curse, is its focus on individualism.
What does it mean to be an individual within a community? What does it mean to be a community within a city, and then a state, and a country? What impact does one make on society when his or her focus is mainly on protecting his or her own desires and way of life? What happens when someone like this takes a peak into the world outside his or her bubble?
What does it mean to be “me” inside of “we”?
Growing up in a tiny town in the rural midwest part of this country, I existed within several bubbles, as does any child. My family helped shape my earliest beliefs. The bigger bubbles outward were my church, my school, and then my town. These bubbles also helped to define me and shape my character.
Venturing out meant visiting other towns, cities, states, and eventually, countries. A church trip to an event in another town. A school trip to the state capitol. A family trip to other states, and then to a Caribbean island. All of these experiences allowed me to see that there were other realities, sometimes similar and sometimes much different from my own. These experiences made a big impact on me. But I experienced all of them while within one of my bubbles. I was “me, within a we”, but the definition of “we” extended only to my family, school, and church, even if we traveled out of our normal surroundings.
Once I left my bubbles, alone, things changed. College in Chicago was a huge shock to my system. An even bigger shock was living in Mexico. The only way to grow and survive in these new and uncomfortable situations was to ask questions, make mistakes, and be curious. Remaining in those situations was life-altering and eye-opening, and produced a lot of personal growth. Different bubbles were formed.
I was still me, but the longer I spent in these new situations, the more I became a part of new “we” bubbles. New definitions of “we” meant that I began to see the world from different perspectives.
What does this have to do with bilingualism? Everything.
Learning a language is uncomfortable, especially in the beginning. As you learn, you begin to realize that the language you are learning is directly related to the way a certain culture or group of people lives, how they view the world, and what they value. The longer you spend in that language, the more it becomes part of you and alters your understanding of other people and your capacity to empathize with people. You become part of a new “we.”
My linguistic and cultural “we” as a bilingual extends to much more of the world’s population than it did as a monolingual. I love being me within many. But I had to allow myself to be uncomfortable in order to get here.
“Yo” Dentro de “Nosotros”
Los Estados Unidos es un país único, y hay muchas cualidades que lo hacen ser así. Una cualidad única, que es una bendición y también una maldición, es su individualismo.
¿Qué significa ser un individuo dentro de una comunidad? ¿Qué significa ser una comunidad dentro de una ciudad, y luego un estado, y un país? ¿Qué impacto tiene un individuo hacía la sociedad cuando su enfoque es primeramente proteger sus propios deseos y su propia forma de vivir? ¿Qué pasa cuando alguien así echa un vistazo al mundo que existe fuera de su burbuja?
¿Qué significa ser “yo” dentro de “nosotros?”
Criándome en un pueblito en el parte rural al medio oeste del país, yo existía dentro de varias burbujas, come lo hace cualquier niño o niña. Mi familia me ayudó en formar mis primeras creencias. Las burbujas más grandes que existían hacía el exterior eran mi iglesia, mi escuela, y luego mi pueblo. Esas burbujas también ayudaron a definirme y formar mi carácter.
Aventurarse a salir significaba visitar otros pueblos, ciudades, estados, y, eventualmente, países. Una excursion de la iglesia a otro pueblo. Una excursion escolar a la capital del estado. Unos viajes a otros estados, y luego a una isla del Caribe. Todas aquellas experiencias me dejaron ver que existían otras realidades, a veces parecidas y a veces muy distintas a las mías. Me crearon un gran impacto. Pero todas se realizaron mientras me quedaba dentro de una de mis burbujas. Yo era “yo, dentro de un nosotros“, y el significado de “nosotros” se extendía solamente a mi familia, mi escuela, y mi iglesia, aunque saliéramos de nuestros alrededores típicos.
Cuando salí de mis burbujas, sola, las cosas cambiaron. Asistir a la universidad en Chicago fue un choque a mi sistema. Un choque aún mayor fue vivir en México. La única manera de crecer y sobrevivir en esas condiciones nuevas e incómodas fue hacer preguntas, equivocarme, y mantener la curiosidad. Quedarme en aquellas situaciones cambió mi vida, me abrió los ojos, y produjo un gran crecimiento personal. Otras burbujas se formaron.
Seguía siendo yo misma, pero entre mas tiempo que pasaba en esas situaciones nuevas, mas empezaba a ser parte de nuevas burbujas de “nosotros.” Nuevas definiciones de “nosotros” significaba que yo empecé a ver al mundo desde perspectivas diferentes.
Y esto ¿que tiene que ver con el bilingüismo? Todo.
Aprender otro idioma es incómodo, especialmente en el principio. Mientras aprendes, empiezas a darte cuenta de que el idioma que estás aprendiendo está directamente relacionado con la manera en que ciertas culturas o grupos de gente viven, como ven al mundo, y que valoran. Entre más tiempo pasas con esa idioma, lo más que se hace parte de ti y cambia tu entendimiento de otra gente y de tu capacidad de empatizar con la gente. Te vuelves a ser parte de un nuevo “nosotros.”
Mi “nosotros” lingüístico y cultural como persona bilingüe se extiende a mucho mas de la población del mundo que antes se extendía cuando era persona monolingüe. Me encanta ser mi misma, es decir, ser “yo”, dentro de muchos. Pero me tenia que dejar estar incómoda para poder llegar aquí.